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¿Qué es el permiso de residencia y trabajo por cuenta propia?
El Estado español cuenta con un amplio catálogo de permisos para personas extranjeras que desean vivir y trabajar en el país de manera legal. Uno de los más interesantes es el conocido como permiso por cuenta propia, llamado formalmente Autorización de residencia temporal y trabajo por cuenta propia (Código HI 28).
El motivo por el que muchos ciudadanos extracomunitarios optan por solicitar esta vía de entrada al país es fácil de entender: no es necesario un contrato de trabajo por parte de una empresa nacional. Además, permite desarrollar proyectos propios al frente de una compañía, un proyecto propio o como freelance.
Son cada vez más los profesionales y emprendedores que utilizan esta vía para establecerse en Europa a través de España. Sin embargo, para que se conceda este permiso, la persona interesada debe presentar una serie de documentación que acredite la viabilidad de su proyecto.
Entre otras cosas, será imprescindible demostrar capacidad financiera para llevar a cabo el negocio por cuenta propia. También es muy relevante probar que se cuenta con la cualificación profesional y los estudios necesarios para ello.
¿Cómo se conoce popularmente a este autorización?
Aunque el nombre oficial de esta condición es el de Autorización de residencia temporal y trabajo por cuenta propia (Código HI 28), es muy habitual que se utilicen otros nombres más sencillos y cotidianos para hablar de ella.
Es importante conocerlos para comprender a qué se refieren las personas o la administración cuando hablan de esta posibilidad. Entre los nombres más utilizados se encuentran los siguientes:
- Permiso por cuenta propia.
- Residencia y trabajo por cuenta propia.
- Permiso de residencia por cuenta propia.
- Permiso de trabajo por cuenta propia.
Aspectos importantes del permiso de residencia y trabajo por cuenta propia
Conviene que las personas extranjeras que se plantean esta opción conozcan a detalle los aspectos clave que deben considerar. De esta manera, será mucho más fácil preparar un plan de negocio que se ajuste a lo que solicitan las autoridades españolas. Muchas de ellas están reflejadas en la Ley 14/2013, de 27 de septiembre, en puntos como el artículo 69.
- Proyecto empresarial: el candidato a la residencia tendrá que presentar un plan de negocio coherente y bien estructurado. En este documento hay que explicitar cuál es el tipo de actividad, la ubicación de la empresa en el país y el mercado objetivo. Además, es aconsejable aportar toda la información posible sobre los recursos financieros y materiales, así como la previsión de gastos e ingresos.
- Capacidad económica: aunque ya se haya plasmado parte de la economía del profesional en el proyecto, estos datos han de ser apoyados con datos reales. Por eso, el solicitante de la residencia debe demostrar que cuenta con los medios económicos suficientes como para sostener el proyecto hasta que este comience a ofrecer ingresos.
- Cualificaciones y experiencia: el ciudadano debe contar con las capacitaciones según la normativa laboral española. Además, se requiere presentar datos reales sobre experiencia profesional que certifiquen que se puede llevar a cabo la actividad propuesta.
- Cumplimiento normativo: por supuesto, el plan de negocio debe estar adaptado a la legislación nacional y europea. Esto implica la solicitud y obtención de licencias y permisos necesarios para iniciar la actividad, el cumplimiento de las normas de seguridad, la adaptación a la LOPD o el respeto al derecho de los trabajadores, entre otras.
- Seguro médico: quienes busquen el permiso de trabajo por cuenta propia deberán comprometerse a contratar un seguro médico que cubra cualquier problema sanitario en España. Esto se puede hacer tanto a través de un seguro privado como del sistema nacional de salud.
- Ausencia de antecedentes penales: este requerimiento es común a todas las personas que quieren instalarse en España y está establecido en normas como la Ley 4/2000. Hay que aportar un certificado de antecedentes penales tanto en su país de origen como en cualquier otra nación donde la persona haya residido en los últimos cinco años.
- Evaluación técnica: si el proyecto profesional es complejo, es muy probable que se requiera un paso extra para conceder el permiso de residencia y trabajo por cuenta propia. Las autoridades tendrán que realizar una evaluación técnica del plan del ciudadano. Esto se llevará a cabo por parte de expertos o instituciones especializadas en garantizar la viabilidad del plan de empresa.
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Tipos de permisos de trabajo por cuenta propia
No existe un único modelo de permiso de trabajo por cuenta propia. En realidad, hay diferentes modalidades que se adaptan a las características del solicitante, así como a su actividad y propuesta profesional:
- Permiso inicial de residencia y trabajo por cuenta propia: es la opción más habitual utilizada en el Estado español. Con esta licencia, los interesados pueden iniciar su actividad en el país y probar que su plan tiene vida a largo plazo. Por ello, el permiso tiene un tiempo límite de un año y puede ser renovado si se cumplen una serie de condiciones.
- Permiso de residencia y trabajo por cuenta propia para emprendedores: este permiso se reserva a quienes presentan un proyecto innovador o de alto valor para la sociedad española. Está vinculado al visado de emprendedor, legislado en la Ley 14/2013, que apoya a los emprendedores de todos los rincones del mundo y a su internacionalización. Suele ofrecerse a quienes trabajan en los sectores de la innovación tecnológica.
- Permiso de residencia no lucrativa con conversión a trabajo por cuenta propia: een muchos casos, personas que ya se encuentran en España legalmente pero sin posibilidad de trabajar se plantean emprender. En estos casos, quienes obtuvieron una residencia no lucrativa pueden convertirla en un permiso de residencia y trabajo por cuenta propia. Para ello, tendrán que pasar por las mismas fases de presentar un proyecto viable ante la administración de extranjería.
¿Cómo se solicita el permiso de residencia y trabajo por cuenta propia?
Una vez que se tiene claro qué es y qué se necesita para obtener el permiso de residencia y trabajo por cuenta propia, es interesante repasar el paso a paso para llevar a cabo la solicitud.
- Plan de negocio: conviene insistir en la idea de crear un plan de negocios lo suficientemente solvente. Cuanto mejor presentado y detallado sea, más fácil resultará su aprobación. Por eso, se recomienda prepararlo con tiempo y cuidado y, si es posible, dejar que un abogado especializado en este tipo de requerimientos lo evalúe.
- Demostración de recursos financieros: la demostración de los recursos financieros suficientes debe ser oficial y completa. No solo hay que demostrar que se cuenta con dinero para las inversiones necesarias y para sostenerse los primeros meses: también hay que asegurar fondos para cubrir los gastos personales y familiares.
- Registro y licencias: tanto en el plan como en el balance económico hay que demostrar conocimiento sobre los pasos legales que habrá que hacer antes de iniciar la actividad. Esto implica tanto las licencias como los permisos que regulan el proyecto de manera específica.
- Solicitud de autorización: con toda esta documentación preparada, es el momento de presentar la solicitud de autorización de residencia y trabajo por cuenta propia. Para ello, el interesado o su representante legal deberán dirigirse a la oficina de extranjería o al consulado español en su país de origen.
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¿Qué hacer tras la concesión del permiso de trabajo por cuenta propia?
Si todo está en orden y las autoridades confirman la concesión del permiso, el solicitante recibirá una notificación con una resolución favorable. Ese es el momento de ponerse manos a la obra:
- Iniciar la actividad económica: bajo el amparo de su nuevo estatus legal, el profesional ya puede iniciar su actividad económica. Para ello, tendrá que cumplir con los requisitos fiscales, laborales y comerciales que estén vigentes en España.
- Recogida de la resolución: aunque ya tenga noticias del permiso, es imprescindible recoger personalmente o a través de un representante la resolución. Para ello, hay que dirigirse a la Oficina de Extranjería. Este documento servirá como prueba de que la actividad es legal ante cualquier autoridad del país. En él se establecen las condiciones del permiso de residencia y trabajo, así como la duración inicial del permiso, inicialmente de un año.
- Obtención del NIE (número de identificación de extranjero): el NIE es importante para realizar los trámites oficiales. Por eso, con la resolución favorable en la mano se debe acudir a una comisaría de policía para obtenerlo. Este número es personal y único y se usa tanto en trámites legales como fiscales.
- Empadronamiento: la vía del permiso de trabajo por cuenta propia exige empadronarse en el municipio donde residirá el solicitante. El certificado de empadronamiento será un documento clave para formalizar la residencia en España y actuar conforme a la ley nacional.
- Inscripción en la Seguridad Social: como este tipo de permiso está vinculado a una actividad profesional, el último paso sería inscribirse en la Seguridad Social como autónomo. De este modo, la persona se afilia y comenzará a pagar sus cotizaciones correspondientes.
Denegación del permiso de residencia y trabajo por cuenta propia
El hecho de que las autoridades denieguen la solicitud de permiso no implica que no se pueda intentar revertir la situación. En muchas ocasiones, desde la administración se explican los motivos, como una falta de viabilidad del proyecto o insuficiencia de recursos económicos. Ante estos escenarios, estas son las acciones recomendadas por los profesionales del Derecho:
- Revisión del caso: es importante estudiar qué ha fallado en la solicitud, dónde están los puntos débiles del expediente. La ayuda de un abogado es especialmente interesante aquí.
- Presentación del recurso: es posible que el letrado considere que la denegación no está justificada. En estos casos se abre la vía de presentar un recurso contencioso-administrativo en un plazo de un mes desde la notificación.
- Solicitudes futuras: si la denegación está fundamentada, pero se puede resolver, entonces se pueden corregir estos problemas y presentar una nueva solicitud asegurándose de cumplir, ahora sí, con todos los requisitos.
¿Cómo renovar el permiso de trabajo por cuenta propia?
Al terminar el plazo de un año será necesario que el profesional renueve su permiso de trabajo. Para ello, tendrá que probar que el negocio sigue activo y que es económicamente viable.
En ese sentido, la administración requerirá que presente las declaraciones fiscales. Estas se pueden apoyar con todos los documentos que se consideren necesarios para justificar la continuidad del negocio.
¿Cuál es la diferencia entre el permiso por cuenta propia y el visado de emprenderos?
El visado de emprendedores (Autorización de Residencia para Emprendedores, Ley 14/2013 de 27 de septiembre) está pensado para que los extranjeros que no tienen nacionalidad en ningún país de la UE puedan emprender en España.
Quienes solicitan este permiso pueden desarrollar en España un proyecto innovador y de gran interés económico. Si se cuenta con este tipo de idea, solo hay que disponer de una excelente formación, experiencia y un buen plan de negocio.
Este visado es muy interesante, puesto que incluye la posibilidad de traer a familiares directos y no requiere una autorización previa de residencia para tramitarlo.
Se otorga por un tiempo máximo de un año y simplifica mucho el proceso: no hay que solicitar una tarjeta de identidad de extranjero (TIE) y la solicitud se cursa relativamente rápido. La única cosa a tener en cuenta es que sí es necesario obtener un número de identidad de extranjero (NIE).
Por otro lado, la autorización de residencia temporal y trabajo por cuenta propia (Código HI 28) está dirigida a extranjeros que desean trabajar en España como autónomos sin necesidad de que su actividad sea innovadora.
En este caso, entra en juego todo lo explicado en este artículo: hay que presentar un plan de negocio, recursos económicos suficientes y cualificación profesional.
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